
¡Hola a todos, en el último mensaje hablamos sobre El poder de la alineación, y hoy vamos a hablar sobre Brillando en la oscuridad: encontrando la belleza interior!
“Las personas son como vidrieras. Brillan y resplandecen cuando sale el sol, pero cuando llega la oscuridad, su verdadera belleza se revela solo si hay una luz en su interior.”
— Elizabeth Kubler Ross
La cita de hoy nos recuerda que nuestra verdadera belleza se encuentra dentro de nosotros, esperando ser revelada cuando la oscuridad se asiente. La vida puede ser desafiante, y todos enfrentamos momentos difíciles que ponen a prueba nuestra fuerza y resiliencia. Pero es durante estos momentos que brilla nuestro verdadero carácter y luz interior.
Abraza tu luz interior
Todos tenemos una luz interior que puede brillar intensamente si se lo permitimos. Es lo que nos diferencia de los demás y nos hace únicos. Nuestra luz interior representa nuestros valores, creencias y pasiones. Cuando abrazamos nuestra luz interior, nos volvemos confiados, valientes y auténticos. Podemos inspirar y motivar a otros a hacer lo mismo.
Acepta tus defectos
Nadie es perfecto, y todos tenemos defectos. Abrazar nuestros defectos es un paso esencial para abrazar nuestra luz interior. Cuando aceptamos nuestras imperfecciones, podemos concentrarnos en nuestras fortalezas y trabajar para mejorarnos a nosotros mismos. Nuestros defectos nos hacen humanos e identificables. Son parte de lo que somos y pueden ser una fuente de fortaleza y resiliencia.
Encuentra tu propósito
Encontrar nuestro propósito en la vida puede ayudarnos a conectarnos con nuestra luz interior. Nos da dirección y significado y nos ayuda a entender nuestros valores y creencias. Cuando tenemos un sentido de propósito, estamos más motivados, enfocados y determinados. También podemos inspirar y motivar a otros a encontrar su propósito y vivir sus mejores vidas.
Nutre tus relaciones
Nuestras relaciones con los demás también pueden ayudarnos a conectarnos con nuestra luz interior. Cuando nos rodeamos de personas que nos animan y nos apoyan, podemos brillar más. Nuestras relaciones también pueden ayudarnos a crecer y aprender de los demás. Pueden desafiarnos a convertirnos en mejores versiones de nosotros mismos y ayudarnos a superar nuestras luchas.
Deja que tu luz brille
Una vez que hemos abrazado nuestra luz interior, es fundamental dejarla brillar. Podemos hacer esto compartiendo nuestras pasiones, talentos y dones con el mundo. También podemos inspirar a otros siendo amables, compasivos y auténticos. Cuando dejamos que nuestra luz brille, podemos tener un impacto positivo en el mundo y brindar alegría y felicidad a quienes nos rodean.
“Ustedes son la luz del mundo. Una ciudad en lo alto de una montaña no puede esconderse. Tampoco se enciende una lámpara para cubrirla con una vasija. Por el contrario, se pone en el candelero para que alumbre a todos los que están en la casa. Hagan brillar su luz delante de todos, para que ellos puedan ver las buenas obras de ustedes y alaben a su Padre que está en los cielos.”
— Mateo 5:14-16
¿Qué quiero que te lleves hoy?
La cita de Elizabeth Kubler Ross nos recuerda que nuestra luz interior es nuestra verdadera belleza. Es lo que nos diferencia y nos hace únicos. Debemos abrazar nuestra luz interior, aceptar nuestros defectos, encontrar nuestro propósito, nutrir nuestras relaciones y dejar que nuestra luz brille. Al hacerlo, podemos inspirar y motivar a otros a hacer lo mismo y tener un impacto positivo en el mundo.
Como siempre, te animo a ser diferente y sobre todo anímate a regalarle una sonrisa a alguien, jamás sabes si esa sonrisa puede cambiarle el día de manera positiva. Sé luz y comparte con otros este mensaje y si te ha gustado, dale like para que tengamos más personas con sonrisas.